Cuando se habla del espacio es fácil perder la noción del tiempo y las distancias. Las distancias espaciales son muy grandes, incluso para algo tan rápido como la luz. La luz recorre unos 300.000 kilómetros en un segundo, pero incluso a esa velocidad la luz que nos llega de la Luna tarda 1.26 segundos, la luz que llega del Sol tarda 8 minutos y medio, Neptuno está a 4 horas luz del Sol, la luz de la estrella más cercana (Alfa Centauri) tarda 4 años en llegar a la Tierra. La luz producida por una supernova que ocurriera en ese sistema tardaría 4 años en llegar a nuestros ojos, es decir, veríamos una supernova de hace 4 años, es lo más parecido a un viaje al pasado.
El titular del artículo de elmundo.es "Captan una supernova pocas horas después de su explosión" da a entender que la explosión ha ocurrido hace un momento, pero ya sabemos cómo funcionan las distancias espaciales, así que estamos preparados para la verdad. La galaxia M101 está situada a "tan sólo" unos 27 millones de años luz. A partir de este dato se desmonta el resto del artículo.
"El descubrimiento de una supernova de tipo Ia en una galaxia cercana a la Tierra pocas horas después de su explosión...". ¿Galaxia cercana? 27 millones de años luz, ¿es una galaxia cercana? Entonces, ¿qué es la Galaxia de Andrómeda que está a la décima parte de distancia? Eso sin tener en cuenta que el periodista está mezclando planetas con galaxias, y una supernova es lo último que querríamos tener cerca de nuestro planeta.
"lo que se conoce como una gigante roja, que es unas cien veces más luminosa que el Sol", ¿sólo cien veces? La Wikipedia referencia a un artículo en el que se estima que cuando el Sol se convierta en gigante roja llegará "a ser de acuerdo con las últimas estimaciones casi 260 veces mayor y 2.700 veces más luminoso de lo que es hoy".
elpais.com también publica la noticia pero en agosto de 2011, ¡cuatro meses antes que elmundo.es!
También hablan de la "relativa cercanía" de la galaxia a la que pertenece la estrella pero en este caso sí que mencionan la distancia "unos 21 millones de años luz", aunque luego lo estropean comentando que "un telescopio en EE UU la ha captado a las pocas horas de la explosión", cuando (como ya hemos visto) en realidad el hecho ocurrió hace 21 millones de años (o 27 según la Wikipedia).